28 de abril de 2010

Equipaje


Me encanta viajar; sin embargo, hay una parte que detesto: empacar; más ahora que lo hago por cuatro. Esa manía de cargar hasta el perico… por si hace frío, por si hace calor, por si llueve, por si me duele la cabeza o me resfrío; y así se va llenando la maleta de cosas, de las cuales sólo ocupo la mitad. En mi próximo viaje he decidido cargar sólo lo indispensable. Dejaré espacio en mi equipaje para traer de regreso sólo buenos recuerdos.

Igual pasa en la vida, la travesía más larga y emocionante. ¿Cuántas cosas cargo que realmente no necesito? ¿Qué estoy dejando fuera porque ya no hay más espacio? Mi bagaje emocional es el más pesado de todos, va conmigo a donde quiera que voy. Vaciaré la maleta, aligeraré la carga, para llenarla sólo de cosas buenas. Quiero viajar ligero, vivir ligero.

4 comentarios:

  1. Hay que hacerlo, Cecilia. Ni odios, ni rencores, ni temores que echaron raices. Nada que se convierta en un pesado fardo quebnos haga ir mas lento en el camino, o qu epor lo menos, nos detenga innecesariamente. Un abrazo

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  2. Empacar... emprender un viaje... la magia de la ausencia... tener que regresar... aaahhh, sabrositas remembranzas me provoca tu texto: yo me pasé 15 años de mi vida viajando de estado en estado, haciendo libros ¡¡wooow! Creo que soy de las pocas personas que les ¡encanta! vivir en hotel je je je

    Me encanta el parangón final que haces: viajar ligero, vivir ligero... excelente final y extraordinaria sugerencia.
    No puedo evitar recordar en la cavilación de Borges "Ficciones", tremenda e inspiradora... írala, írala, la Ceci a la altura del maestro ;P

    YARKO

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  3. Mi abuela es una gran viajera, conoce casi todo el mundo y su máxima es siempre la misma: "de lo único que no puedes prescindir es de calzones". Pero me consta que ella lleva su "bolsita de la belleza".

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  4. Ciertamente es lo primero que debe uno hacer cuando quieres ascender por esa espiral llamada evolución...dejar las cargas, yo también tengo la tendencia de guardar, llevar "por si", almacenar y luego, ya después no sé que hacer con tanta cosa...suerte en los viajes, tanto los externos como los internos...mmm, pensandolo bien, a lo mejor ese es el problema que no nos vemos como lo que en realidad somos, viajeros que están de tránsito en este mundo...y debemos ir ligeros.

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